EN EL ARTÍCULO 22

Originalmente publicado setiembre 2009

Mi principal miedo con los políticos es que son unos señores que tienes que legislar sobre temas que muchas veces desconocen. Por eso los avispados anglosajones inventaron la cultura del lobby, grupo de influencia cercana al poder que defienden intereses privados.

Me desagrada esta cultura de lobby tan acrecentada en el mundo político global, ya sean en Bruselas como en Villafranca de abajo. Pero no encuentro mejor forma de combatir esto que uniéndose a él..

Cuando no te sientes representado por los partidos políticos, ni por los sindicatos, ni otros movimientos que están por ahí no te puedes quedar de brazos cruzado. Una sociedad pasiva que permite al político inútil o corrupto está condenada a su fracaso.

Existe una herramienta que nos da la constitución española. En el artículo 22 reconoce y otorga el derecho de asociación. No tengo estadística de cómo está el mundo del asociacionismo en España pero por experiencia propia creo que no somos mucho de esa cultura. Sin embargo la semana pasada participe en la fundación de la asociación de empresas del sector de materiales de construcción de Málaga y desde hace cinco años participo en la asociación nacional. Desde esta última he podido ver que el trabajo realizado en común, las soluciones buscadas entre todos y la magnífica tribuna para hacerse oír ha ayudado en mucho a un sector empresarial que no existía hasta ese momento.

El asociacionismo debe ser una forma válida de vertebrar la sociedad. De dar riqueza, fondo y debate que son importante sobre todo en momentos de necesidad. Una forma de combatir la atonía y poner un “ladrillo”(1) para construir una sociedad más sólida y justa. Todo formamos parte de algo más grande que tenemos que defender. Si tienes algo que decir dilo y busca a otros que compartan tu voz.

En F.I.S.T una correcta película con una correcta interpretación de Silvestre Stallone se cuenta el nacimiento del movimiento sindical en los U.S.A. Trata de la necesidad de asociarse en los momentos duros y también del poder y sus vericuetos… pero eso ya es otra historia

(1) (1)A esta altura de la película hay que estar recordando que el ladrillo es la base para hacer una casa no un mero instrumento para tener una cuenta en un paraíso fiscal.

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